Los jugadores de la selección mexicana abandonaron el estadio Soccer City con un sabor agridulce en la boca. Si bien rescataron un punto en un partido que en un momento parecía perdido, los Tricolores están conscientes de que las condiciones eran propicias para sumar sus primeros tres puntos en la competición.
Uno a uno los futbolistas fueron abandonando el vestidor, pero antes de abordar el autobús rumbo a su hotel de concentración en el sur de Johannesburgo, se dieron tiempo para charlar en exclusiva con FIFA, sobre sus impresiones del partido y las lecciones aprendidas tras el silbatazo final.
Mantener la calma, resolver las chances
En la conferencia de prensa, el técnico Javier Aguirre enfatizó en la baja de juego que sufrió el equipo al recibir el gol sudafricano. El defensor Carlos Salcido coincidió, y explicó las razones. “Después de su gol, ellos mejoraron mucho, se plantaron bien y se ordenaron dentro del terreno. Nosotros perdimos muchos balones al buscar el empate, y ellos tuvieron más oportunidades”, afirmó.
En el mismo tenor estuvo su compañero en la defensa, Ricardo Osorio, quien además sufrió en carne propia los contragolpes sudafricanos en los últimos minutos del juego. El jugador de Stuttgart reconoció que la ansiedad tuvo sus consecuencias. “La verdad es que corrimos de más al tratar de buscar el empate, y eso provocó que nos cansáramos y quedáramos expuestos a su velocidad. Por eso fue que ellos estuvieron cerca en los últimos minutos”, señaló.
La segunda cuenta pendiente es la definición frente al marco rival. En el primer tiempo, México generó hasta seis oportunidades claras, y no convertirlas dejó al equipo expuesto a quedarse en desventaja, como finalmente sucedió. Javier Hernández, el delantero que entró de cambio en la segunda mitad, analizó este factor. “Jugamos un muy buen primer tiempo, pero no logramos concretar, y terminamos lamentándolo. Cuando entré tuve una oportunidad, pero el defensa cerró bien y no logré marcar”, señaló.
Salcido y Osorio coincidieron. “El resultado es justo porque cada equipo tuvo un tiempo. Pero nosotros tuvimos muchas oportunidades en el primero y de haberlas convertido la historia pudo haber sido distinta”, señaló el defensor del PSV Eindhoven, mientras que el jugador del Stuttgart repuso, “fuimos superiores en los primeros cuarenta y cinco minutos, pero nos fuimos en cero en el marcador, esa fue la razón por la que sufrimos tanto en el complemento”.
Así, México ya sabe los puntos a corregir para su próximo encuentro ante Francia. Bien dicen que el primer paso para resolver los problemas es reconocerlos, y de ahora en más, el cuadro de Javier Aguirre trabajará a fondo para darle una alegría a su afición en su segundo partido en Sudáfrica 2010.
