Mientras que las lesiones de algunos jugadores importantes han marcado las semanas previas al comienzo de la Copa Mundial de la FIFA, la recuperación de otros que habían llegado a ser descartados ha tranquilizado a entrenadores y miles de aficionados en todo el planeta.
La gran mayoría de las 32 selecciones puede enorgullecerse de contar en sus filas con al menos un jugador que ha demostrado que la combinación entre avances médicos y esfuerzo personal puede echar por tierra hasta la más pesimista de las previsiones. FIFA.com repasa algunos de los casos de regresos que serán recibidos como agua de mayo.
Por fin una buena noticia
Alemania es sin duda la selección a la que peor han tratado las lesiones este año. Poco antes de definir la lista final, los problemas se le acumularon a Joachim Löw con las bajas de Michael Ballack, René Adler, Christian Traesch y Heiko Westermann, aunque la recuperación de Sami Khedira ha sido la noticia que el seleccionador germano esperaba ansioso para cerrar la convocatoria para Sudáfrica.
A finales de marzo, el centrocampista del Stuttgart tuvo problemas en un ligamento de la rodilla durante un partido de la liga alemana y llegó a ver amenazada su participación en la cita mundialista. No obstante, Khedira, que se libró de la cirugía, trabajó a destajo y llegó a tiempo de ganarse un sitio en el once titular y demostrar que, a pesar de su escasa experiencia, puede desempeñar un papel fundamental al lado de Bastian Schweinsteiger.
España también se llevó algún susto a escasos meses de la cita sudafricana. De la noche a la mañana, figuras como Cesc Fàbregas y Fernando Torres fueron a parar a la enfermería y vieron amenazada su participación en el certamen. Sin embargo, las preocupaciones de Vicente del Bosque han disminuido en los últimos amistosos. En una sucesión de buenas noticias, Fàbregas regresó contra República de Corea y Torres, recuperado de una operación artroscópica en la rodilla, jugó y marcó ante Polonia.
Los problemas físicos tampoco se han olvidado de Brasil. Aunque nunca se llegó a considerar seriamente que pudieran causar baja, Kaká y Luís Fabiano tuvieron desajustes musculares en el tramo final de la temporada y se sometieron a un intenso tratamiento antes de volver a los terrenos de juego. Kaká, limitado en sus apariciones con el Real Madrid en 2010 por sus dolencias en el pubis, está intentando dejar atrás los malos momentos, y frente a Tanzania demostró que puede volver a rendir como antes.
Rendirse, nunca
Entre los 736 jugadores inscritos en el certamen hay dos que merecen una mención especial por su esfuerzo. Uno de ellos es el internacional portugués Pepe, que se rompió los ligamentos de la rodilla derecha en diciembre de 2009. A pesar de la previsión inicial, que anunciaba un período de recuperación de no menos de seis meses, el zaguero ha hecho lo que parecía imposible y, una semana antes del inicio de la competición, ha pasado a ser una alternativa más en la defensa para Carlos Queiroz.
Japón también sufrió un caso que alcanzó gran repercusión: el del portero Yoshikatsu Kawaguchi, que se rompió la pierna en septiembre de 2009. Recuperado pero sin esperanzas de volver a la selección, el guardameta entró en la lista de Takeshi Okada a última hora con la misión de aportar al equipo su experiencia de dos citas mundialistas.
Entretanto, dos potencias de la Copa Mundial de la FIFA han vivido recientemente dramas parecidos. En Francia, las lesiones de William Gallas incrementaron el suspense ante el anuncio de la convocatoria final de Raymond Domenech. En mejor forma, el zaguero del Arsenal fue citado para la concentración de entrenamiento de Tignes para cubrir la vacante dejada por Lassana Diarra entre los 23 elegidos. Por su parte, el inglés Gareth Barry, lesionado desde el final de la temporada, volvió en Sudáfrica a los entrenamientos y trabaja ahora para recuperar el puesto de titular, aunque probablemente no lo logre hasta el segundo partido.
Dos naciones en ascuas
Son muchas las selecciones que cuentan con jugadores que han vencido la batalla contra los infortunios físicos. En Argentina, el portero Sergio Romero se pasó casi dos meses en el dique seco antes de recobrar la titularidad bajo los palos en el reciente amistoso que enfrentó a su equipo con Canadá. Por su parte, el delantero danés Nicklas Bendtner se ha reintegrado a los entrenamientos de su selección después de un mes luchando contra sus molestias en la ingle.
En la lista de los que se han recuperado justo a tiempo están también Nadir Behadj, de Argelia; Edgar Barreto, de Paraguay; Claudio Bravo, de Chile; David Suazo, de Honduras; Nemanja Vidic, de Serbia; Surprise Moriri, de Sudáfrica; y Martin Skrtel, el mariscal de la zaga de Eslovaquia. Otros, como el italiano Andrea Pirlo y el uruguayo Diego Forlán, han superado sin contratiempos sus achaques y ya cuentan los días para el debut.
Sin embargo, la participación de dos grandes figuras del fútbol mundial sigue estando en el aire a pocos días del inicio del certamen. Con una fractura en el brazo, el marfileño Didier Drogba parece estar más cerca de reintegrarse en el equipo centroafricano, que debuta el día 15 frente a Portugal. El caso de Arjen Robben ya es más complicado, puesto que el holandés sufre una lesión muscular importante y ni siquiera ha viajado todavía a Sudáfrica. Los seguidores de las selecciones de ambos jugadores cruzan los dedos para que haya un final feliz. Sin duda, la Copa Mundial de la FIFA sería la que más saldría ganando si así fuera.
