
En el arco, Júlio César. En el lateral derecho, Maicon. En el eje de la zaga, Lúcio. Este es el inicio de la alineación de una de las retaguardias más potentes del globo. Para desesperación de los delanteros rivales, la secuencia tiene un impacto doble, ya que figura en la defensa tanto del laureado Inter de Milán como de la selección brasileña que acudirá a Sudáfrica en busca de un sexto título mundial.
Cuando Brasil entra en juego en una Copa Mundial de la FIFA, lo natural es esperar jugadas desconcertantes de sus hombres de ataque y una lluvia de goles, y astros como Robinho, Kaká y Luís Fabiano son capaces de ofrecer ese espectáculo. En el equipo confeccionado por Dunga, sin embargo, hay algo más que aplaudir. Con una trayectoria colectiva envidiable bajo la dirección del ex centrocampista y jugadores aclamados individualmente, el combinado brasileño pretende imponerse a partir de su fuerza defensiva, cuya eficacia empieza a explicarse precisamente a través de ese victorioso trío del Inter.
Júlio César, Maicon y Lúcio han acumulado una serie arrolladora de títulos en los últimos doce meses. Con la Seleção, primero ganaron la Copa FIFA Confederaciones y luego la competición preliminar para la cita sudafricana, en 2009. En su club, se adjudicaron la Copa de Italia y la Serie A, y el sábado pasado alzaron la Liga de Campeones de la UEFA. ¿Es suficiente?
Para Maicon, la respuesta es definitivamente “no”. “Ha sido un año espectacular”, afirmó el lateral en el Santiago Bernabéu después del triunfo sobre el Bayern. “Pero aún no ha acabado, ¿no? Sabemos que nos queda afrontar el mayor torneo, y vamos a intentarlo todo para conquistarlo también”.
Parada obligatoria
Por “intentarlo todo”, quizás se refiera a complicar hasta el extremo la estrategia ofensiva de sus rivales. Arjen Robben, Lionel Messi, Zlatan Ibrahimovic, Ronaldinho Gaúcho, Francesco Totti, la base de las selecciones alemana e italiana… Los desafíos de los brasileños en el Inter han sido grandes, y se han saldado invariablemente con éxito.
El Inter presenta la mejor defensa del campeonato italiano, con 34 goles recibidos en 38 partidos. En la Liga de Campeones, el cuadro de José Mourinho fue el segundo mejor, con únicamente nueve tantos en contra en 13 choques, un promedio de 0,69 por encuentro, superado sólo por el Burdeos, con 0,6. En el torneo continental, el Barcelona, hasta entonces imbatible, acabó estrellándose contra la muralla del Inter. En cuatro duelos, el Barça registró una media de goles (uno por partido) equivalente a la mitad de los que consiguió contra sus demás adversarios.
Es evidente que un entramado defensivo no se compone sólo de tres jugadores, y que requiere una táctica elaborada. Pero no deja de ser curioso observar que su excelente rendimiento se repite en el conjunto brasileño, que alinea a esos tres mismos futbolistas. En la competición preliminar mundialista, Brasil tuvo la defensa menos goleada, con 11 tantos en contra en 18 contiendas (0,61). Consiguió que ataques como el argentino y el uruguayo se limitasen a un único gol en dos partidos. En el balance general, apenas fueron tres los encuentros en los que el equipo vio perforada su meta más de una vez, y en diez la mantuvo a cero.
Antiguos compañeros
Para contribuir a la producción de esas pasmosas cifras, Júlio César, Maicon y Lúcio se han beneficiado de una oportunidad extraordinaria para compenetrarse. No son muchas las defensas que tienen el privilegio de disponer de una base unida en su club. Pero el grado de conexión de los zagueros brasileños va más allá del Inter, como destacó este lunes el central Juan, en Curitiba, donde está concentrada la escuadra de Dunga.
El jugador del Roma recordó que el tándem que forma con Lúcio en el eje ya actuó en el Bayer Leverkusen y en Alemania 2006 (en este caso, también con el volante Gilberto Silva por delante), y que se dio a conocer junto a Júlio César en el Flamengo. El central suplente Luizão acompañó a Maicon en el Cruzeiro. “Y ahora tenemos a los tres en el Inter. Por eso, quienes juegan juntos tienen una adaptación mucho más fácil, y formamos una defensa estable, difícil de superar. Contamos con la confianza del trabajo realizado en los últimos tres años y medio, de una secuencia de partidos disputados con los mismos hombres”.
Los jugadores del Inter están disfrutando de un merecido, aunque breve, momento de descanso. En el caso de Júlio César, el reposo ha sido incluso menor, pues aun contando con permiso se pondrá a las órdenes de Dunga este martes. Maicon tampoco oculta su deseo de incorporarse lo antes posible a la selección. “Quiero encontrarme con los compañeros y trabajar en serio”, señaló. Para este trío, no habrá ningún problema si el maratón de títulos se prolonga hasta el 11 de julio.
